Está en juego nuestra propia sobrevivencia, especialmente la de nuestros hijos, la de nuestros nietos.
¿Qué estamos esperando para actuar?
¿Qué estamos esperando para actuar?
¿Qué estamos esperando para actuar?
Está en juego nuestra propia sobrevivencia, especialmente la de nuestros hijos, la de nuestros nietos.